Vivimos tanto juntos
perdimos la noción del tiempo
disfrutamos cada momento
cada vez que viajamos por el mundo.
Pero no eramos invencibles
no eramos inmortales
aunque nos sentimos como tales
y llego lo impredecible.
Caímos al suelo
como dos patos heridos
caídos pero siempre unidos
destrozados gracias al cielo.
Y así desapareciste de mi vida
como un relámpago
como una luz
que encontró la mas cruel salida.
Nuestro mundo se derrumbo
todo se oscureció
hubo una crisis terrible
que termino con lo indestructible.
Entonces sufrió mi corazón
se perdió la ilusión
matando cada razón
y me atore en la desolación.
Empecé a extrañarte
a sentir tu ausencia
recordando tu esencia
de tu alma al imaginarte.
Hasta no poder mas
hasta que el corazón estallo
mi tranquilidad perturbo
de saber que no podía imaginarte jamas.
Pero una señal tuya
un reflejo inconfundible
una paz inconmovible
me dijo que estabas por la luna
que tu alma se había transformado
había nacido algo nuevo
entre los grandes secretos
y un inolvidable pasado.
Entonces te busque
de bajo de las piedras
hasta entre la hiedra
y por fin te encontré
Eras una estrella que efectivamente estaba alrededor de la luna
que brillaba como ninguna
y eras la mas bella.
Así entendí como había de vivir
supe como sin ti
aunque no te olvide
porque en el alma siempre te lleve.
Como una estrella cada noche te veo
como una estrella cada noche te veo
en mis sueños siempre estarás
y desde allá nuevas canciones cantaras
hasta que llegue el momento
de que yo suba al cielo
y me vuelva a reunir
nuevamente junto a ti.
Pero por mientras
en tu nombre volare
por tu recuerdo ayudare
a las personas como lo hicimos alguna vez.
Como una estrella te veo,
como una estrella te tengo,
como una estrella te amo,
la estrella de mi pasado.
J. Samuel Maldonado García.